Ama el pobre a su pareja
y la atiende con veneración
de día y noche piensa en ella
rogando a Dios que le dé una ocasión.
Ama el pobre en su mediagua
con lo mínimo, pero con todo el corazón
cubre y protege a sus guaguas
con afecto, cariño y con inmenso amor.
Ama el rico en su palacio
con cuidados, sirvientes y pasión
pero todo lo que siente no supera
las sensaciones que viven los pobres en su galpón.
Ama el rico y ama el pobre
con la misma intensidad
el rico lo vive entre sedas y manjares
el pobre vive luchando con la adversidad.
Puede amar solamente
quien amor ha sentido
si cuando despierta cada mañana, en su mente
imagina, sentimientos, afecto, mucho amor y cariño.
La razón de la vida
está en amar en exceso
para que en el mundo el hombre conozca
la emoción maravillosa y el encanto de un beso.