Toses, toses, toses, despiertas tosiendo
la tos es tan reiterada y tan persistente
que no alcanzas a ordenar ningún pensamiento en tu mente
te das cuenta que tu vida se va consumiendo hasta la muerte.
Empiezas a pensar en los momentos ya idos
y en otros tantos que nos prometimos
habrá llegado el día en que mi vida termine
mis fuerzas se fueron … temo que la muerte en mi sangre germine.
Me levanto me afirmo, camino, tambaleo
lo hago con esfuerzo, tropiezo, y casi no veo
consumo bebidas, diversos remedios y tantos brebajes
mejora no tengo, acepto, es el fin de este viaje.
Miro, observo, tantos rostros
que se desfiguran
con miradas y gestos preguntan
no se imaginan mis dolores, ni mis amarguras.
No saben lo que pienso
tampoco imaginan el dolor que yo siento
me queda poco para hundirme en el castigo eterno
o subir a los brazos de nuestro Dios paterno.
Esta tos que se impone, persiste
te hace olvidar todo lo que existe
comienza y prosigue hasta dejarte extenuado
es aquí donde te preguntas, si estás terminado.
Esto sucede por no haber sido cuidadoso
al no darnos cuenta que la salud es el bien más precioso
solo, cuando lo pierdes lo consideras valioso
al perderlo por un largo tiempo tu vivir es tormentoso.
No puedes leer, te duele la cabeza
no puedes conversar, te corroe la tristeza
quieres estar solo porque has perdido la capacidad
te falta humor, entusiasmo, convicción y voluntad.
Todo te molesta y rápido pierdes la inspiración
pequeños detalles te hacen perder la atención
no comes, no bebes como antes
se fue el placer, se te fue el sabor y la felicidad está distante.
Me siento cansado y sin trabajar he perdido las fuerzas
es la tos, me consume, también dolores y molestias diversas
no sé cuanto dure este castigo
en el futuro debo ser cuidadoso con los míos y conmigo.
No le pido a Dios…tanto me ha dado
que aceptaré lo que sea, por algo me lo he ganado
no pido milagros y espero en la soledad
solo tener otra, otra, otra, oportunidad.