Si cada mañana, al abrir los ojos
abres tu mente a pensamientos positivos
te levantarás dinámico , emprendedor, animoso
tu jornada la vivirás alegre, entusiasta, activo.
El buen ánimo y la predisposición positiva
la perseverancia y la confianza en tus capacidades
te aportarán el deseo, la fuerza y la convicción
para vivir una existencia matizada de emoción.
El optimista se esfuerza en encontrar soluciones,
visualiza las ventajas, elige las reales opciones
al optimista lo destaca su convicción y perseverancia
lo que le permite adaptarse y gobernar las circunstancias.
El optimista es cuidadoso y reflexivo
nunca decae, en sus propósitos, en su objetivos
al optimista lo destaca su valerosa actitud
el buen ánimo, la perseverancia y la rectitud.
El optimista no se cansa, de analizar cada acción
se esfuerza hasta encontrar la mejor opción
acostumbra proponer sugerencias y soluciones
si no acierta, él se inmuniza ante las frustraciones.
El optimista también conoce el fracaso
con su actitud positiva, él siempre va a pararse
el sabe encontrar en las derrotas
un estímulo para crecer y superarse.
El optimista siempre está motivando
con su una actitud positiva y emprendedora
las enseñanzas que permanentemente va dejando
son su predisposición, animosa, valiente y esperanzadora .
El optimismo fortalece tu voluntad
el empeño, el esfuerzo y tu personalidad
de los errores siempre podrás rescatar algo positivo
convirtiéndote en un ser mejor y más productivo.