Todos los días recuerdo
momentos que no quiero sepultar
aunque la cordura, yo la pierdo
es sano, conveniente, y útil, olvidar.
Podré dejar de querer, lo que añoro
si día y noche, todavía lo lloro
si lo que sueño y quiero
en mi mente y con todo el corazón lo espero.
El amor aquel se anidó en mi carne
desde ese día no he podido sublimar el hambre
de la pasión y el cariño que provoca
este querer, angustiosamente me sofoca.
Recuerdo las inigualables noches
que intensamente compartimos
también recuerdo los días
que muy unidos y felices vivimos.
Recuerdo de tus labios, la dulzura y suavidad
tu regazo era todo, calidez y bondad
la ternura y delicadeza de tus caricias infinitas
la fuerza de tu cuerpo y la gracia de tu figurita.
Lo más hermoso, lo conocí amando
te amo , te amo … siempre te estaré esperando
lo más doloroso lo conocí queriendo
te amo, te amo ….aunque por ti estoy sufriendo.
Al rozar tus manos, tus labios y tu intimidad
me permitiste conocer más placeres y más felicidad
que manera de sentir tanto placer
imploro la ocasión de volverte a poseer.
Pensando en esos incomparables momentos
transcurren largas horas de mi vida
a diario me consumo en los intentos
de recrear las jornadas contigo compartidas.